
Se trata de la campaña MEDITS-AUT, la primera des estas características que desarrolla un grupo de investigación catalán con sede en l’Institut de Ciències del Mar (ICM-CSIC).
La campaña se realizará a bordo del buque oceanográfico Vizconde de Eza y recorrerá las aguas de Catalunya, la Comunidad Valenciana y parte de Murcia durante 24 días.
Los datos se recogerán siguiendo el Programa Nacional de Datos Básicos (PNDB) y complementarán los de la campaña MEDITS que realiza anualmente el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC).
Barcelona, 10 de noviembre de 2025
El próximo lunes 17 de noviembre, una veintena de científicos y científicas del Institut Català de Recerca per a la Governança del Mar (ICATMAR) y del Institut de Ciències del Mar (ICM-CSIC) se embarcarán en el buque oceanográfico Vizconde de Eza de la Secretaría General de Pesca para iniciar, por primera vez, una campaña MEDITS en otoño: la MEDITS-AUT25. Este tipo de campañas se desarrollan habitualmente durante los meses de primavera, y el hecho de replicarla en otra época del año permitirá obtener una visión más precisa del estado de los recursos pesqueros del Mediterráneo occidental.
La campaña se extenderá durante 24 días y cubrirá toda la GSA 6, subárea geográfica establecida por la General Fisheries Comission for the Mediterranean (GFCM), que comprende las aguas del Mediterráneo occidental desde Catalunya hasta Murcia. Esta iniciativa será posible gracias a la colaboración entre el ICATMAR y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, y se convertirá en la primera campaña oceanográfica de estas características realizada por un grupo de investigación catalán. El principal objetivo es obtener datos complementarios a los que se recogen durante la campaña MEDITS que realiza anualmente el IEO-CSIC en primavera, y que se emplean para estimar la abundancia y la distribución de las especies objetivo de la pesca de arrastre.
Siguiendo el protocolo MEDITS, durante la campaña se llevarán a cabo un mínimo de 88 pescas, cubriendo la plataforma y el talud continental a profundidades que pueden ir desde los 10 m hasta los 800 m. Además, también se recogerán datos oceanográficos de las masas de agua, como la temperatura y la salinidad, que permitirán estudiar sus características y los cambios a lo largo del tiempo.
“La realización de la MEDITS-AUT25 nos proporcionará información muy valiosa, ya que permitirá observar cambios estacionales en la distribución de las especies objetivo de la pesca de arrastre debidos a factores biológicos y ecológicos. Además, contar con dos campañas anuales en diferentes épocas del año supone un aumento significativo en la resolución de los índices de abundancia y biomasa de las especies analizadas”, afirma el investigador y jefe de campaña Joan Baptista Company.
La campaña MEDITS
La campaña MEDITS (Mediterranean International Trawl Survey) se inició en el año 1993 a raíz de un reglamento del Consejo Europeo sobre la Política Pesquera Común (PPC). El reglamento instaba a los Estados Miembros a realizar campañas oceanográficas para obtener series largas de datos científicamente sólidos para la gestión y conservación de los stocks de especies demersales, es decir, asociadas al fondo marino, del Mediterráneo. Los datos obtenidos se incorporan al Programa Nacional de Datos Básicos (PNDB).
Con los años, el programa ha evolucionado más allá de la evaluación de los recursos pesqueros para incluir también el estudio de las comunidades y los ecosistemas marinos, así como la identificación de hábitats clave para las especies o el análisis de residuos marinos, entre otros. La información recopilada durante las campañas MEDITS es utilizada por grupos de trabajo para la evaluación de stocks de la Scientific, Technical and Economic Committee for Fisheries (STECF) y la GFCM de cara a la elaboración de recomendaciones en materia de gestión pesquera.
“Ahora, la obtención de datos en otoño siguiendo este mismo protocolo permitirá recoger información sobre fases tempranas del ciclo de vida de algunas especies que no se pueden encontrar en primavera, como por ejemplo el salmonete de fango (Mullus barbatus)”, señala la investigadora del ICATMAR Marta Blanco.